James Cameron no conocía a Arnold Schwarzenegger más que de haberle visto en "Conan, el bárbaro". De hecho, le horrorizaba como actor. Sin embargo, Carolco, la productora de "Terminator", que tenía gran confianza en el éxito del actor austríaco y le quería en la película, arregló una entrevista entre ambos en un restaurante de Los Angeles con el fin de que Arnold convenciese a Cameron de sus cualidades interpretativas. Antes de ir al restaurante, el propio Cameron comentó a su esposa: "Tengo que ir a cenar con Conan el Bárbaro, pero no tardaré mucho...". Sin embargo, "Conan" resultó ser de lo más simpático y encantador. Hasta el punto de convencer al reticente director para dar al ex-culturista el papel de su vida. Aunque en un principio Lance Henriksen iba a hacer de Terminator, con Arnold Schwarzenegger como el heroe. Cuando Schwarzenegger leyó el guión, pidió interpretar al Terminator en lugar del chico bueno. Además de acertar con el papel Schwarzenegger ganó 6 millones de dólares por pronunciar 133 palabras.
En uno de los primero esbozos del guión, Cameron ideó el robot como una especie de robot en forma de endoesqueleto de metal líquido que podía tomar cualquier forma para progresar en su misión asesina, pero en ese momento se estrenó una nueva versión del clásico de ciencia ficción: "La cosa", dirigida por John Carpenter, cuyo monstruo cambiaba de forma, y Cameron abandonó esa idea que no obstante recuperó años más tarde para aplicarla al robot asesino de la segunda entrega de la saga.
Algunos afirman que la película está inspirada por una película de Michael Crichton, el célebre escritor de "bestsellers". La película se tituló "Almas de metal" (Westworld, en el original). Iba sobre un parque de atracciones con robots en el que se reproducían varias épocas históricas, y donde el mal funcionamiento de un cyborg pistolero interpretado por Yul Brynner convertía el lugar en una pesadilla donde los robots asesinaban a los turistas visitantes. Pero el escritor de ciencia ficción Harlan Ellison demandó a James Cameron por considerar que el argumento de la película estaba basado directamente en dos de sus guiones para la serie de televisión.
Cameron tuvo que enfrentarse a numerosos escollos para hacerla ya que tenía poco presupuesto. A pesar de que el sonido estereofónico existía ya en el momento de rodar la película, se filmó en mono. La fábrica donde se produce la batalla final con el terminator, es en realidad en Cyberdine Systems. Sarah y Reese se dirigían alli para evitar un posible futuro haciéndola explotar. Al final no sale esta escena en la película pero sienta las bases de la segunda parte, aunque nunca se escribió la película con la idea de hacer una secuela.
Linda Hamilton se rompió un tobillo antes de empezar el rodaje, de manera que hubo de llevar el pie vendado durante casi toda la filmación para poder interpretar la película
Y ahora un gazapo y un detalle. El gazapo es que Sarah, ya embarazada, casi al final de la película, para a repostar en una gasolinera, le dice al dueño que le llene el depósito del coche. En ningún momento se ve que abone el importe de la gasolina. Al niño que le hace una foto sí le paga los cuatro dólares por la fotografía, pero repostar le sale gratis. Y el detalle que seguro que no sabeís es que cuando Arnold roba un auto, vemos que la toma siguiente es la rueda de ese mismo auto pisando un camioncito azul de juguete. Si nos fijamos bien vemos que es el mismo camión en el que anda el T1000 en "Terminator 2", durante la persecución. James Cameron tiene una pequeña afición a destrozar camiones debido a su pasado como camionero.
Una escena en la cual una persona recoge la CPU del terminator después de que fuese destrozado fue filmada, pero no se incluyó.
El personaje que interpreta Michael Biehn es mordido en la mano por otro personaje. Esto le sucede en cada película de James Cameron en la que interviene (Aliens y Abyss).
Aunque quizás es más conocida la segunda parte todo llega de esta, y aunque en la segunda había también una frase muy conocida es en esta donde Schwarezenegger dice su frase estrella: "¡Volveré!"
El personaje que interpreta Michael Biehn es mordido en la mano por otro personaje. Esto le sucede en cada película de James Cameron en la que interviene (Aliens y Abyss).
Aunque quizás es más conocida la segunda parte todo llega de esta, y aunque en la segunda había también una frase muy conocida es en esta donde Schwarezenegger dice su frase estrella: "¡Volveré!"
Lo que nunca podría haber imáginado es que el filme se estrenó con escenas censuradas en Suecia. ¿Es por qué salía Arnold en cueros?
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